Cómo liberarnos del personaje que nos impide ser felices o alcanzar nuestras metas más elevadas.
Reflexiones varias en un día de cumpleaños…
Subir a lo más alto…
Un día soñé que era un Indio, bueno, eso lo soñé muchas veces, pero en este sueño, algo me decía que subiera a la parte más alta del terreno. Era un instinto heredado de mis ancestros, subir a lo más alto para poder divisar “la totalidad”… supongo que era cuestión de supervivencia.
Hoy, en mi territorio de asfalto, donde la conexión con el espíritu de la Naturaleza, es en forma de escapada, “subir a lo más alto” sigue siendo cuestión de supervivencia, pero esta vez para ver mi vida, mis acciones, el sentido de mi existencia.
¿Qué pregunta me hago hoy?
Hoy me pregunto qué es importante de verdad, qué sentido tienen las cosas, qué orden de prioridades debo establecer, cómo vivir con conciencia esta vida y sobre todo, qué debo liberar y cómo hacerlo para mantener el equilibrio, la paz, la salud y poder seguir así avanzando en mi camino…
Aquí y ahora
El viaje interior, o el «regreso al hogar» como dice un viejo amigo, es una de mis mayores motivaciones hace mucho, y por muchos descubrimientos que vaya haciendo, siempre termino dándome cuenta que hay mucho camino que recorrer, por lo cual, llega un momento en el que no te queda más remedio que sentir la tranquilidad de disfrutar de este instante, aquí y ahora, sin más pretensiones que existir, que junto a la convicción de que esta vida es solo un pequeño episodio, llegas a la conclusión de que estás inmerso en un gran aprendizaje donde eres algo mucho más grande que el cuerpo que habitas, infinito diría yo…
Aprendizajes que cambian nuestra vida…
Por elegir un aprendizaje, creo que hay un secreto, a la vista de todos, que pienso es uno de los ingredientes de la felicidad y de la más profunda de las liberaciones, pero al mismo tiempo algo muy difícil de llevar a cabo para los que somos mortales.
Es algo así como que cuando nacemos, al instante empezamos a reproducir un programa, que con nuestra educación se va reprogramando más y más, volviéndose cada vez más sofisticado y donde una parte importante de ese programa, la heredamos de los familiares que nos precedieron.
Podría citar muchos libros o fuentes que reproducen esta idea con precisión y palabras más adecuadas, pero hoy quiero decirlo así como lo siento ahora. Estoy seguro que muchos sabemos qué es eso del personaje, el ego, esa parte de nosotros que intenta controlar la situación, modificar su existencia y la de su entorno a su antojo, y esa parte que por momentos se vuelve contradictoria e insaciable donde nada parece contentarle.
Lo difícil es darse cuenta y emprender soluciones
Es más difícil darse cuenta de que vivimos en una cárcel mental, de que una parte de nuestra personalidad nos quita la libertad y que sin darnos cuenta nos ponemos a perseguir objetivos que nos alejan cada vez más de la felicidad.
Todo el mundo sabe que debemos aprender a reconocer nuestros errores, a pedir perdón, aprender a escuchar, pero, ¿cómo se hace eso?, ¿podremos alcanzar la motivación para tratar de ser mejores personas?. Yo creo, y en eso estoy, hay que comprender al personaje que reproduces, el programa que hay en ti y que normalmente actúa en automático, pero lejos de dominar a ese personaje, de ocultarlo o ejercer un poder sobre él, hay que comprenderlo hasta el punto que no lo necesites, y entonces otra parte de ti se potencia y ya no tienes que vencer a ese personaje, simplemente eliges otro programa, otra actitud, otra forma de ser, y aun pudiendo elegir el antiguo programa, consideras que el otro es mejor, porque es una existencia desde la libertad y entonces puedes existir de un modo más auténtico, donde ya no importa si eres un Indio en una tribu, o un urbanita en una multinacional.
¿Cómo reconocemos este programa?
Normalmente este programa está actuando allá donde consideramos que está la felicidad, el éxito, el gran objetivo, y ahí es cuando te das cuenta de que hemos basado nuestra existencia y felicidad en la consecución de metas, de objetivos, y cada uno lo enfoca a cubrir el vacío más grande con el que ha crecido: necesidad de ser valorado, necesidad de ser amado, tener dinero, poder etc…Hay que revisar con honestidad todas las metas que hay en nuestra vida y ver cuáles están reproduciendo un programa que cuando las alcancemos, tan solo nos reportarán un breve placer pasajero pero que no llenarán ningún vacío.
Cuando cumples los objetivos de tu programa, no sueles darte cuenta y sigues persiguiendo cosas sin parar
Un día pasó algo curioso en mi vida, aunque yo no lo sentía, los hechos objetivos y reales, decían que había llegado a un punto donde había conseguido aquello para lo que me había programado, o al menos se parecía mucho a lo que yo había interpretado como tener éxito. Pero yo seguía sintiendo un vacío, el deseo de hacer más y más porque no me llegaba, vivía estresado, con ansiedad y muy alejado de lo que hoy considero vida sana, en equilibrio y en paz. Y aunque en ese momento no pude observarlo “desde lo más alto”, hoy, la conclusión es que la felicidad nunca va a estar en cosas materiales, porque es una actitud, un estado mental o emocional que se vive en compañía de seres a los que amas, en ausencia de lastres emocionales y en equilibrio y armonía a todos los niveles de tu Ser. Por lo que creo que la felicidad, o aquellos objetivos elevados que nos marquemos en la vida, porque no creo que la felicidad sea lo único válido a perseguir, son algo que depende de la capacidad que tengamos para liberar el lastre emocional acumulado en esta vida, y la capacidad de conectar con una versión más existencial de nosotros mismos.
Enfoque existencial, espiritualidad, viaje interior.
Llegados a este punto, muchos seremos como vehículos a gran velocidad estrellándose contra un muro, uno detrás de otro, porque aquí llegamos a un territorio místico, de religiones, de ideologías, de creencias, de todo tipo de hipótesis que se llevan realizando desde el principio de los tiempos y que siempre han sido motivo de guerras, masacres y donde lo que a unos les conduce a lo más alto, a otros les siembra la duda, el miedo y la desconfianza. Temas con lazos infinitos que nos conectarán quizás con el daño que se ha producido por personas que hablaban en nombre de Dios, y que le ponían a este “Dios” cara, intenciones, planes, familia y todo tal cual para que no fuera ese Dios que pretendían hacer lo más grande, sino una personita cualquiera, una especie de vecino con todo tipo de cualidades humanas. Me pregunto qué pasaría si por un instante nos olvidamos del camino que nos lleve a esa totalidad, la parte de la espiritualidad que hemos desarrollado los humanos con nuestra mente, y simplemente nos sentimos como que ya estamos allá, conectados, con ese sentimiento vibrando en nuestro interior. Seguramente solo sea un estado pasajero, pero luego podremos elegir el camino que queramos para alcanzar ese fin: la religión, la filosofía, la creencia o estado que nos apetezca. Ver el mapa antes de hacer el viaje siempre es una buena idea.
El nombre o la búsqueda de una verdad absoluta no puede ser la excusa para no recorrer el camino
Sea como sea que le llamemos, creo que necesitamos alcanzar una conciencia de que somos algo más grandes que un cuerpo, para poder ver desde lo más alto, y entonces poder observar al personaje, comprenderlo, ver su forma de actuar y entonces poder elegir otra forma y dejar de actuar programados. Sé que esto se puede hacer simplemente desde nuestra personalidad física, sin irse “más allá”, pues es una de las formas en las que tengo que hacerlo en mi trabajo con las personas, por respeto a su sistema de creencias, pero a mi me parece como si estuviese en la silla del ordenador con los pies subidos a las ruedas y me quisiese desplazar… como no me agarre a algo exterior, no me voy a mover…
Cómo nos afectan las creencias limitantes y «el personaje»
Cada persona estará afectada de forma diferente por este programa, unos estarán haciendo todo lo posible para que en cada situación se les reconozca, otros transmitirán una forma de ser débil y victimista para que alguien venga a rescatarlos, otros tratarán de luchar a toda costa para controlar la situación, ejercer control sobre las personas y conseguir Poder. Otros se sentirán vacíos de recursos, pobres y con «el agua hasta el cuello luchando por mantenerse a flote» y enfocarán todos sus esfuerzos a conseguir dinero a costa de lo que sea para luego poder pararse a pensar qué hacer. Otros simplemente lucharán contra la enfermedad, y la salud será su mayor recompensa, hasta que la consigan, y entonces se marcarán otros objetivos para ser felices. Existen tantos programas como personas, pero lo importante es saber que todos ellos están impregnados en nuestra forma de ser, en nuestras relaciones y que están detrás de cada conflicto, de cada disgusto, de cada sentimiento de miedo, de impotencia, frustración, soledad o rabia. La única forma de entenderlo, es observarnos sin actuar, sin juzgarnos y reconocer que estamos en una cárcel mental, que reproducimos un programa, y entonces podremos ver otras opciones. Llegados a este punto, podremos valorar “los daños” en nuestra personalidad después de tantos años sometidos a este programa. Unos habremos desarrollado ciertas capacidades y otras las hemos ocultado. Por ejemplo, si me he estado sintiendo superior a otros, he ejercitado mucho mi mente, pero he vivido cierto aislamiento, y entonces mi parte emocional y sentimental ha estado más cerrada, por lo tanto, la parte que más tengo que desarrollar ahora es la capacidad para sentir y relacionarme con las personas de igual a igual, y apagar más la parte mental y hacer ciertas cosas que me ayuden a parar mi mente y mi necesidad de entenderlo todo.
Esto nos lleva a una zona complicada, una zona de confort, donde estamos tan programados y tan mentalizados, que difícilmente podremos salir sin ayuda externa, porque en cualquier momento nos encontraremos en el punto de partida sin que ni siquiera nos hayamos dando cuenta.
Esto me parece algo importante a lo que destinar todos los esfuerzos posibles, y que si queremos hacer ese viaje interior que muchos consideramos crucial en nuestras vidas, y no queremos que pasen los años sin que haya avances, debemos trabajar nuestra capacidad para identificar este programa, este personaje, y desarrollar nuestra capacidad de ver, de amar y de ser lo que realmente somos para poder alcanzar la plenitud como seres humanos.
Cómo emprender este camino
Este es un camino que muchas veces hay que recorrer en solitario, o al menos tener un tiempo para encontrarse con uno mismo y conocerse. Aprender de los errores y tener humildad para tratar de irse mejorando poco a poco con la ayuda de lo que mejor nos venga. Cada uno podrá trazar su propio camino y al estilo que más oportuno considere, pero he visto que en la mayoría de los casos, los que vivimos en la “sociedad moderna”, tenemos muchas partes enfermas que debemos sanar para poder avanzar. Hay muchas formas, numerosas técnicas que nos pueden ayudar en este camino, pero estas son las que a mí me funcionan y las que utilizo conmigo mismo y en consulta:
EFT (Técnicas de liberación emocional)
Muchas veces estamos repletos de traumas, miedos, frustraciones, experiencias de todo tipo que nos han estado marcando a lo largo de toda la vida. Es por eso que lo primero que me parece importante es trabajar para desprenderse de esos lastres, y cada uno tendrá que emplear la técnica que mejor le vaya para este fin. Yo solo conozco algunas y para esta primera fase, a mí la que me sirve y me va bien en las consultas es el EFT (Técnicas de liberación emocional). +info
Terapia energética y de meridianos
Otra parte, que veo que hace muchas veces imposible poder ver más allá del problema y que lleva a la persona a un estado de ansiedad, impotencia, frustración y toda clase de estados patológicos, son diversos conflictos energéticos, que a estas alturas de las reflexiones, no trataré de convencer a nadie de la existencia de un campo energético ni de todo lo que esto implica, pero estoy totalmente convencido de que es imposible estar bien sin que haya un equilibrio energético, y para esto, entre muchas otras, están las terapias energéticas o de meridianos como +Reiki o +acupuntura.
Nutricion y dietética
A veces no podemos encontrar energía y motivación porque hay tóxicos en nuestro organismo, o ciertas intolerancias, en este punto la nutrición puede ayudarnos a apoyar el proceso de recuperación a través de pautas nutricionales enfocadas a eliminar tóxicos de la dieta y productos a los que somos intolerantes o que merman nuestra sistema inmunitario o capacidad de desintoxicación, para poder incluir otros alimentos que van a aportarnos los nutrientes que más necesitamos y potenciar los efectos deseados. +info
Nutrición Ortomolecular, celular y fitoterapia
Muchas veces, observamos que la vida nos ha llevado a un estado de enfermedad, de bloqueos a todos los niveles, por lo tanto, necesitamos emprender acciones a diferentes niveles para alcanzar la salud, y muchas veces, el estado patológico hace que las células de nuestro organismo no tengan los micro nutrientes necesarios para su buen funcionamiento y ya no es suficiente simplemente con comer sano, es por eso que utilizo la medicina ortomolecular, celular y fitoterapia, que utiliza la suplementación de vitaminas, minerales, oligoelementos y principios activos de plantas medicinales para realizar este proceso desde un enfoque bioquímico y a nivel celular.
Psicoterapia transpersonal e integrativa & coaching
También necesitamos poder expresarnos, reflexionar en voz alta, entender, compartir nuestra situación particular aunque solo sea a través de un diario, hablar del modo en que nuestro personaje actúa, de cómo se comporta con nuestro entorno, y establecer una serie de metas, objetivos y pautas para ir entendiendo a este personaje y completar el trabajo de comprensión y liberación que nos permitirá avanzar en nuestro camino. Este proceso nos ayuda a tener una visión general de la situación y poner en marcha todo el proceso terapéutico, de desarrollo personal o el que necesitemos en el momento que nos encontramos.
Si has llegado hasta aquí, sin duda el tema te interesa, puedes comentar lo que desees y estaré encantado de responder o ayudar en lo que pueda.
Gracias por seguir este blog.
Saludos
Rubén.
Hola Rubén, leí tu entrada en el blog y me entraron ganas de comentar, pero como hoy estoy un poco reticente a la hora de expresarme con mis propias palabras, con tu permiso las voy a tomar prestadas de dos canciones de Manolo García: «Por respirar» y «No estés triste». Un abrazo y gracias 😉 Por muchos cumpleaños más…
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
Renacerás. Será un regalo de tu propia fe.
Tu propia cuna la que has de mecer cantando en la alborada.
Renacerás. Si no te empeñas en querer sufrir.
Precioso tiempo tu vida ha de ser, preciosa perla rara.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
Hay un cielo ahí afuera
con sus planetas visibles colgando.
Hay un mundo visible
como un decorado de feria.
Y una montaña de vidas
que con respirar ya se conformaría.
Y el toro negro de Osborne recortado sobre el horizonte
es una sombra negra.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por respirar, por respirar serena y saber esperar.
Como se cruzan las carreteras
para después volver a separarse,
se cruzaron tu vida y la mía;
dardos hacia la diana de nuestra lotería.
¿Por qué se cruzan las vidas que se tocan
y luego vuelven a separarse?
Un filón de suertes que se mezclan.
Alquimia en el laboratorio Kosmos del doctor Noestamossolos.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
Renacerás. si no te empeñas en querer sufrir.
Precioso tiempo tu vida ha de ser, preciosa perla rara.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
—–
Prueba a ser una nube, a flotar, alcotán sobre praderas.
Prueba a surcar ríos, a luchar por ellos,
A sentirte arcilla y caña de ribera.
Laurel en gota que espejea
Y errar cometa vegetal sin hilos
Prueba a surcar ríos aunque el agua solo llegue a tus rodillas
O te cubra y esté fría.
Verás que hay más
Que la corona de espinas bajo la que te resguardas,
Verás que hay más,
Verás que el mundo gira más.
Por eso no estés triste, amor.
Por eso no estés triste
Por eso no estés triste amor,
Que no estés triste.
Antes que la tristeza sea de suela de zapato
Humildad y camino
O letra de abecedario,
Ser látigo y restallar a la modorra los sentimientos,
Ladera para que resbalen las penas.
Por eso no estés triste, amor.
Por eso no estés triste
Por eso no estés triste amor,
Que no estés triste.
Prueba a ser arlequín,
Regalar inasible tu entereza.
Prueba a surcar ríos, a luchar por ellos,
Sentir que reverdeces, que creces en la entrega.
Tropel, caudal de mieles turbias,
Barquito liberado a la corriente.
Prueba a surcar ríos aunque sean ramblas de cantos
Si consigues alejarte de ti misma.
Verás que hay más
Que son rosarios de lamentos bajo los que te marchitas,
Verás que hay más
Verás que el mundo gira más.
Por eso no estés triste, amor.
Por eso no estés triste
Por eso no estés triste amor,
Que no estés triste.