Si contamos que tenemos 2 padres, 4 abuelos, 8 bisabuelos, 16 tatarabuelos, y si seguimos con los tátaras hasta 9 generaciones hacia atrás, siendo nosotros la décima generación, tenemos 1022 antepasados, sin los cuales nuestra vida no sería posible. Yo no conocí más allá de 2 abuelos, pero sin embargo, muchas veces los patrones de comportamiento y otros temas familiares, se repiten sistemáticamente en cada generación. 

La Genética es una ciencia que nos puede asombrar con la cantidad de información que se puede transmitir a través de los genes, pero a día de hoy, es triste tener que decir que aproximadamente el 95% de nuestro ADN es considerado «Basura» (me pregunto a quién se le habrá ocurrido llamar Basura a algo por el simple hecho de no ser capaz de saber para que sirve… seguro que es conocido en el entorno de todos aquellos que aseguran que es imposible que haya vida en otros planetas, porque nosotros, los terrícolas, desde nuestro granito de arena en la playa infinita, no lo hemos descubierto…)

Hay quien piensa que el ADN no comete errores y que sus mutaciones o «errores» corresponden a un proceso que se puede explicar o que ciertas experiencias traumáticas vividas por una persona, son capaces de «grabarse» en el ADN y transmitirse a modo de «lección pendiente» a futuras generaciones.

Yo no sé cual es la explicación, ni el modo en el que se pasa de generación a generación, pero soy testigo de la evidencia de gran cantidad de personas que «heredan» una habilidad especial para revivir situaciones que han experimentado sus antepasados: Que si su relación con el dinero desde un sentimiento permanente de pobreza, que si hombres mujeriegos, enfermedades familiares, características personales como temeridad, propensión al alcoholismo, a la depresión, a la incapacidad de tener relaciones estables, inseguridad, desvalorización, desgracias familiares que se repiten generación tras generación…. patrones idénticos que muchas veces se pueden agrupar perfectamente por familias…

También soy testigo de la posibilidad de que una persona de ese sistema familiar, tome conciencia del problema y que de un modo no aceptado aún por la ciencia y considerado a día de hoy pura superstición y «dados os meigallos», asuma la responsabilidad de toda esa carga, de ese lastre, de esa lección pendiente producto de un trauma familiar perdido ya en el olvido y sane este tema a todos los niveles, ya no solo de su Ser, sino de todos sus antepasados (para más información buscar Constelaciones familiares de Bert Hellinger). Que de repente esa conducta, ese carácter o tradicción, esa amenaza deje de ser un problema y deje de heredarse….

No hablamos de temas baladíes, cosas sin importancia. Hablamos de cáncer, de adicciones, de conductas que destruyen familias, que derrumban a personas, situaciones que derivan en tragedias familiares y que generan impactos difícilmente olvidables.

Por lo tanto, pienso en esas 1022 personas, en esas 9 generaciones atrás. La infinidad de realidades vividas. Susurros existenciales tatuados en nuestro ADN, ecos de más de mil vidas que retumban aquí y ahora en nuestro presente. Risas y sarcasmos de una sociedad ajena a increíbles descubrimientos que danzan ante nuestras hipnotizadas narices. Doctores y científicos de máxima reputación de espaldas a la evidencia, mientras gente de a pie, con la milésima parte de su formación, se convierten en porteadores del conocimiento y de los descubrimientos de incalculable valor para la humanidad (pero de valor insignificante para los intereses económicos de las grandes corporaciones).

No nos lo van a contar en la tele por el momento, no lo contarán en los periódicos, no saldrán científicos de renombre cuyas carreras están financiadas por corporaciones con grandes intereses económicos en la enfermedad o en la dependencia. 

Ellos no lo contarán, pero nuestros antepasados han estado escribiendo, gritando, llorando, quejándose o contándonos parte de su existencia en nuestro ADN. 

Aquí, como diminutos frente a un inmenso sistema familiar, recogemos el testigo.

Con libertad y por Amor, os honramos con nuestra sanación….

 

Rubén Misa

http://www.centrodesaluz.es

Salud psicoenergética y terapias naturales